Hemos
nacido en latino América, donde para algunos comenzar a comprender esta
palabra tan usada pero poco comprendida nos llevo la mitad de nuestra
vida. Por supuesto que nuestra educación no ha contemplado este vital
concepto, dado que en la escuela no hemos aprendido este término y su
significado. Nuestros padres no lo conocían y tampoco nos hablaron del
tema. La iglesia, la cual amo con sus grandes defectos y virtudes,
tampoco nos explico este término y nos hablo de resurrección. En un
momento parecía muy intelectual mencionar esta mágica palabra, sin
realmente comprender su verdadero significado.
En
mi vida hubo un antes y un después de comprender esta palabra. Al
principio me brindo la respuesta a las diferencias sociales, culturales y
materiales, me amigue con Dios ya que él no era el culpable de tanta
injusticia. La desigualdad tenía una explicación y la misma era la rueda
de la vida. Dios nos brindo el libre albedrió y nosotros cocreamos
nuestro destino y el de nuestras vidas futuras con las acciones,
pensamientos y palabras que realizamos, deseamos y utilizamos. Me di
cuenta que mi conciencia había crecido un paso y me había acercado más a
Dios.
Hace tiempo de esto, los conceptos
en la vida cambian porque a cada paso uno comprende las cosas de
distinta manera, aprende día a día con cada persona que trata y
situación que uno vive. Con cada experiencia el aprendizaje se agudiza y
la conciencia crece.
Karma es la reacción
de una acción voluntaria anterior, de esta u otras vidas. En si todo
deseo voluntario de pensamiento, echo o palabra genera Karma. El Karma
puede ser positivo o negativo y es el equilibrio de nuestras acciones
voluntarias pasadas. El hombre renacerá una y otra vez como príncipe o
mendigo hasta que deja de generar Karma. Y estos renacimientos
tendrán como propósito saldar el karma anteriormente generado.
Dicho
con otras palabras el hombre renace para aprender y hasta que no
aprueba la lección seguirá reencarnado, para que al final un día halla
aprendió la lección de esta vida y esté en condiciones de dar un paso
más adelante en otro plano de conciencia.
Samuel
Wolpin en su libro “El Karma” causa y efecto de nuestra propia
voluntad, escribe textualmente: Si se admite a Dios, un acto malo puede
ser compensado y su fruto detenido por el arrepentimiento. Pero, si no
se admite una mediación divina, nadie puede evitar el fruto, que debe
ser cargado. Desde el punto de vista oriental: es posible liberarse del
Karma, liberándose de los actos que los generan, y tener en las propias
manos el destino, lo cual significa que el futuro de uno está
determinado por uno mismo. Cuando el Budismo enseña que el Karma es el
núcleo moral de todo ser, lo único que sobrevive a la muerte y continua
en la transmigración. Las causas del Karma a no ser que sean compensadas
con efectos adecuados, durante la vida de las personas que las produjo
seguirán reencarnación tras reencarnación hasta quedar del todo
restablecida la armonía entre la causa y el efecto.
Hoy me doy cuenta de la importancia en esta vida es no generar Karma. Por esto me he decidido a escribir este libro…
Del libro; Karma, Salud Y Reiki de Dionisio Bernabe